martes, 15 de abril de 2014

15-04-14

Estar a solas contigo. 
Despojada de relojes, calendarios y armaduras.
Ataviada de murmullos, constelaciones y veredas.
Que un crepúsculo sonrosado te ciña la silueta
y la noche florezca sahumada de ti.

A solas.

Aguardando por ti,
Una hilera de velas
para enmadejarse en tus pestañas
Una copa de cristal,
para emulsificarse con tu saliva
Una sinfonía de cello
para arrullarse con tus palpitaciones
Y la luna entera,
para retozar en el estanque de tu piel.

Me es indiferente el color de tu labial, la marca de tus zapatos o el aroma de tu perfume.
Suspiro sólo por ti.
Por los fragmentos de universo que preñas a cada paso.
Por los porvenires demacrados que entibias con tu sonrisa.
Por las certezas de mármol que haces añicos al nombrarme.

La tierra me balbucea en flores que polinizan de ansiedades cada silencio arracimado en estas manos que te añoran. Que decoran cántaros con la humedad de tu nombre. Que te claman escribiendo.

Que dibujan lo que las transpira.

Anegarme los pulmones con el aguacero de brevas enquistado en tu cuerpo.
Horadarme la coraza del pecho con cada campaneo bullente de tu voz.
Ser desangrado por los leopardos que dormitan bajo tus parpados.

Sentir como tu belleza se abre paso dentro de mí, como me invade con su molicie, como me atrofia cada nervio, como me devora cada filamento.

Imantarme a tus pulsaciones; a esa tibia ráfaga de savias dosificadas cuando te acercas más a mí.

Dejarme arrastrar por la tormenta depredadora en mi interior y sus simientes en las venas.

Reconocer mi lugar en el mundo al tomarte de la cintura.
Adosarte a mi pecho dejando en ridículo a la libertad.
Percibir el repiqueteo de un alborozo afestinado en tus labios.

Probar con elocuencia las fresas de tu boca,
entremezclarlas con la crema de tus dientes,
sorber el licor de su turgencia,
derramarnos en una ambrosía de pulsos y alientos.

Escarcearnos.
Escudriñarnos.
Espumearnos.

Notar que te vas abriendo dulcemente como una rosa, que te vas vertiendo como una cereza, que te vas amielando como el mes de abril.
Descubrirlo en la electricidad de tus caricias,
en la voluptuosidad de tus pechos avellanados,
en la convulsión de tus muslos apulpados,
en la efusión de tu intimidad agrosellada.

Tomarte.
Entrar en ti.
Hacerme tuyo.

Caracolas aletearán en paraísos amusgados de natas.
Guirnaldas se disolverán en pleamares de ámbar.
Géiseres se coparán de hervores frondosos.
Y yo amaneceré enroscado a tus caderas.

Nada más.
Estar a solas contigo.
Eso es lo único que quiero para mi cumpleaños.

4 comentarios:

YSQ dijo...

MI QUERIDISISMO MILO:
LO QUE TU MERECES S 1 MONTON D AMOR COMO EL UNIVERSO Y YO TENGO ESTRELLAS SOLO P/TI ESPERANDO PARA K VENGAS X ELLAS.
BESOTOTES ABRASOTOTES Y TANTISIMOS SUSPIROS...

Emilio dijo...

Gracias por tu cariño tan incesantemente solidario, entrañable Sofi.
Saber que existes, me piensas y hasta me esperas es un regalo tan radiante como una estrella, no sólo para este día, sino para todo el año.
Suspiros como abrazos y besos, a manera de puentes.

Anónimo dijo...

ya sabes que estoy enamorada de vos, mi pluma adorada
Ven a por mi, ráptame en medio de la noche,
las estrellas nos protegen
Doblemente felicidades un año más
no te lo dije en el día porque quería saborearte una vez más y otra esperando volver a verte.
Eres maravilloso
Un abrazo
Shy

Emilio dijo...

Shy, querida, son tus palabras tálamos acolchados donde retozo mis pestañas aladas.
Ahí sosiego mis extravíos, ahí albergo mis pleamares, ahí saboreo mis anhelos apulpados.
Nada parece faltar cuando las palabras desnudan colmando. Y renuevan el placer.
Gracias por la felicitación a manera de beso en los labios.
Abrazo acariciante de entrañas.