viernes, 7 de junio de 2013

REENCUENTRO


AVISO

He retirado de este espacio el relato “Reencuentro”. Lo he hecho para evitar conflictos de derechos en un proceso editorial en el que me encuentro inmerso.
Agradezco la comprensión.

Emilio


10 comentarios:

Anónimo dijo...

Como me gustaría que una sola de tus esntradas fuese mia.
No fruto de la imaginación de un alma lleno de amor que dudo que exista.
Como me gustaría no ser juzgada por la sonrisa o por un mal momento pasado en un determinado tiempo.
Soy humana, no soy perfecta, tengo momentos buenos y malos pero tengo una habilidad innata en meter la pata al parecer.
Debo ser monstruo para no merecer ni una pequeña oportunidad, tan solo obtener rechazo por no ser perfecta en cada momento de mi vida.
Capaces todos de juzgar pero nadie la valentía de decirme porque piensan que soy un monstruo.
Cuanto daría, no por ser amada, eso poco importa, si no porque alguien me escuchase sin buscar nada más, sin juzgarme o si no entiende algo me preguntase.
¿tan dificil es?

Gracias por hacerme soñar en que existe la vida después de agonía
Un beso
Shy

Eli dijo...

Podría comentar muchas cosas...pero me quedo con el final.
Yo he conocido de eso, he tenido en mis labios y en mi alma esa clase de besos...

Hay mucho más de ti en mi blog ahora, Emilio. :)

Anónimo dijo...

MILO ES PRECIOSO!!!!!
TAN LLENO DE AMOR Y PASION QUIERO IR A PARIS Y PRAGA
DI A LA PROTAGONISTA Q ES AFORTUNADA
BESOTOTES YSQ

Emilio dijo...

Estimada Shy:
Yo sólo quiero que mis palabras anhelantes, titubeantes y desbocadas se transfiguren en un espejo donde se refleje el esplendor que estoy seguro ciñe tu existencia.
Abrazos.

Emilio dijo...

Bien sabes, querida Eli, que hay tantos tipos de besos como anhelos.
Hay besos de diluvios y de rocíos. Besos de felinos y de golondrinas. Besos de valses y de tangos.
Hay besos de apogeo. Hay besos de exuberancia. Hay besos de almíbar. Hay besos de desvelo. Hay besos de magia. Hay besos de ráfaga.
Pero ninguno de ellos como los besos de reencuentro. Besos eternos.
Tu blog es un oasis, con todo y mar calmo y refrescante.
Gracias por asomarte a este rinconcito.
Un beso (inserta aquí tu adjetivo predilecto).

Emilio dijo...

Mi Sofi:
Sí, París es muy bonito e imagino que Praga también. Pero no hagas a un lado a mi Salamanca amada, lugar de este mundo donde late todavía un fragmento de mi corazón.
Reitero sin salvedades lo que narré en Reencuentro: el afortunado soy yo.
Gracias por tu cariño solidario.
Besos, besitos y besotes.

Pd. Que no te la cobre no significa que la haya olvidado: me debes una apuesta.

Anónimo dijo...

AIIIIIIIIIICCCCCCCCCCHHHHHHH. SIP TE SALVASTE DE PONER TU FOTO SOY MUJER DE PALABRA PAGARE PERO TU ME DEBES ALGO YA SABES DANDO Y DANDO… JEJEJEJEJJ
HABER SI DESPUES APOSTAMOS Y ENTONCES ME LLEVAS A SALAMANCA????
MIS AMIGAS ESTAN ENAMORADAS DE TU REENCUENTRO
BESOTOTOES

Emilio dijo...

Con o sin apuesta, conmigo o sin mí, creo que tendrías que conocer Salamanca, querida Sofi. Aunque si por esos azares de la vida coincidimos en esa ciudad tan mía, podría narrarte decenas de historias y anécdotas en igual número de callejuelas y rincones.
Te acabo de enviar un correo para afinar el pago de apuestas.
Gracias por tu opinión sobre mi Reencuentro. Estoy seguro que, independientemente de si tiene o no calidad literaria, Reencuentro transpira exactamente lo que lo originó: los júbilos y las tersuras del amor.
Besazo.

Nevi dijo...

Hola Emilio mi nombre es Minerva. Había leído tu blog desde hace meses pero no me atrevía a escribir un comentario. Solo quiero felicitarte ya que este entrada de blog es de los cuentos más románticos que he podido leer. Espero publiques más como este. Muchos saludos desde México DF.

Emilio dijo...

Hola Minerva, mucho gusto.
La verdad que esto de confesar las luciérnagas que dormitan en el corazón, narrar los suspiros desbocados y acariciar a la distancia con pétalos enverbados es una aventura hermosa que se vuelve sublime cuando es acompañada por seres solidarios y generosos. Muchísimas gracias por tu acompañamiento y por la gentileza de comentar mi Reencuentro.
Saludos muy afectuosos hasta mi añorada chilangolandia, ciudad donde nací y que en no pocas tardes vuelve a mí en forma de nostalgias.