Entonces seremos uno en la noche, deshechos en la entrada de la luna, rehechos en la salida de la alborada. Al filo de palabras vaporosas, en el alféizar de un poema inacabado, en el rincón de un suspiro contenido. Canto de amantes que arrulla una ciudad bombardeada por las rutinas. Y que al despertar renovarán aquella contradicción transgresora, aquella misión divina, aquella inconsciencia universal: buscarse hasta volver a encontrarse, tan sólo para volverse a buscar.
Se me antoja una noche a tu lado descubrir tus secretos, beberme tus deseos, coserme a tu piel, perderme en tu boca, dibujarte el cuerpo.
Llenarte de este deseo que me inunda que me devora que me abraza.
Dejar trazos en cada parte de ti, que te recuerden cada beso, cada caricia con que llene tu cuerpo.
Ser lluvia que bañe tu cuerpo ser suspiro en tu pecho ser luz en tus ojos ser sonrisa en tu boca ser latido en tu pecho ser ese sentimiento que venga a darle a tu vida una nueva ilusión.
Huelen a jazmines. Se sienten como brisas. Saben a cerezas. Vuelan como golondrinas. Anidan como cigüeñas. Cantan como ruiseñores. Transpiran aguamiel. Lían alborozos. Cobijan augurios.
A pesar de sus grafías, para mí no son tus letras, son nuestras evocaciones. Y me tejen presagios en los labios: volveremos.
uufffff me encantó , tu delicadeza, y dulzura a la vez, que llega como brisa marina primaveral, muy bello amigo tratado poeticamnte fantásitco, un saludo desde Tenerife
Amable Beatriz: Agradezco mucho la gentileza de tus palabras. Escribo para intentar acariciar a la distancia. Deseo con mucho respeto que lo que hayas leído en este espacio te arrulle con la delicada armonía, no de un poema, sino de una brisa primaveral. Saludos respetuosos hasta Tenerife. E.
8 comentarios:
Y si por una noche desaparecemos
esta distancia
que quema mi piel.
Y dejamos que la frialdad
de tu ausencia
se diluya en un suspiro.
Y nos volvemos parte
de este sueño
que abrigo cada noche.
Y si por esta noche
me fundes a tu boca
en un beso.
Y si desnudamos
no solo la piel
entregándonos
en este loco frenesí.
Y si por esta noche
no existe mas nada
ni nadie, mas que
este deseo de perderme
en tu piel.
Y si dejamos que
nuestras manos sean
quien escriban en nuestra piel
lo que sentimos,
lo que deseamos,
lo que soñamos,
lo que anhelamos.
Y si por esta noche
regresamos a esa alcoba
a prodigarnos caricias
que fundan nuestra alma.
Si solo una noche mas
un suspiro mas,
una caricia mas,
un beso mas,
ser tuya una vez mas
y después déjame volver
a soñar con una vez mas.
CadyG
Entonces seremos uno en la noche, deshechos en la entrada de la luna, rehechos en la salida de la alborada.
Al filo de palabras vaporosas, en el alféizar de un poema inacabado, en el rincón de un suspiro contenido.
Canto de amantes que arrulla una ciudad bombardeada por las rutinas.
Y que al despertar renovarán aquella contradicción transgresora, aquella misión divina, aquella inconsciencia universal: buscarse hasta volver a encontrarse, tan sólo para volverse a buscar.
Se me antoja una noche a tu lado
descubrir tus secretos,
beberme tus deseos,
coserme a tu piel,
perderme en tu boca,
dibujarte el cuerpo.
Llenarte de este deseo
que me inunda
que me devora
que me abraza.
Dejar trazos en cada parte
de ti, que te recuerden
cada beso, cada caricia
con que llene tu cuerpo.
Ser lluvia que bañe tu cuerpo
ser suspiro en tu pecho
ser luz en tus ojos
ser sonrisa en tu boca
ser latido en tu pecho
ser ese sentimiento
que venga a darle a tu vida
una nueva ilusión.
CadyG
Esta noche quiero perderme
en tu desnudes .
Probar el néctar de tu boca
que me incita y provoca.
Recorrer el atlas de tu piel
hasta el amanecer.
Danzar al ritmo de esta melodía
que tus manos vienen a tocar
en mi piel.
Volar con cada caricia
de esas tus manos
que vinieron a hacerme
renacer.
Esta noche quiero
amarte sin miedo
entregarte mi ser
y ver contigo el amanecer.
Dormir en tu pecho
con tus latidos arrullándome,
con tu aliento acariciándome,
con tus manos arropándome.
Esta noche quiero
en tus manos
volver a sentirme mujer.
CadyG
Huelen a jazmines.
Se sienten como brisas.
Saben a cerezas.
Vuelan como golondrinas.
Anidan como cigüeñas.
Cantan como ruiseñores.
Transpiran aguamiel.
Lían alborozos.
Cobijan augurios.
A pesar de sus grafías, para mí no son tus letras, son nuestras evocaciones.
Y me tejen presagios en los labios: volveremos.
Quiero perderme en tu piel
desbordar tus ríos
inundar tus mares.
Perderme en tus labios
amanecer abrazada
a el deseo que despertaste
de noche en mi piel.
Anegarte de caricias todas nuevas
prenderme a tu desnudes
fundirme en un abrazo a ti.
Recorrer tu piel
sentir que por dentro te llevo
desbordando mis deseos.
Sentirme tuya fundida a ti en un abrazo
escurrirme en tus manos
cociendome a tu piel.
CadyG
uufffff me encantó , tu delicadeza, y dulzura a la vez, que llega como brisa marina primaveral, muy bello amigo tratado poeticamnte fantásitco, un saludo desde Tenerife
Amable Beatriz:
Agradezco mucho la gentileza de tus palabras.
Escribo para intentar acariciar a la distancia. Deseo con mucho respeto que lo que hayas leído en este espacio te arrulle con la delicada armonía, no de un poema, sino de una brisa primaveral.
Saludos respetuosos hasta Tenerife.
E.
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